Gratinado de calabacín
El gratinado de calabacín es una receta tradicional de la cocina francesa que consiste en una capa de calabacín cortado en rodajas finas, cubierto con una mezcla de queso y pan rallado y luego gratinado.
No está claro exactamente dónde surgió, pero se cree que se originó en la región de Francia conocida como Alsacia.
El gratinado de calabacín es uno de esos platos que sabe mejor de lo que suena. El calabacín se cocina hasta que está tierno y jugoso, y luego se cubre con una salsa de queso y pan rallado: el resultado es un plato irresistiblemente cremoso y sabroso.
Se puede servir como plato principal o como acompañamiento y aquí te dejamos la receta para que la pruebes por tí mismo/a:
Ingredientes
- 3 Courgettes
- 1 Cubeta de salsa de tomate
- 1 Bola de mozzarella
- 3 cdas. de aceite de oliva
- 1 Ramo pequeño de albahaca
- 2 cucharadas de pan rallado
- Sal
- Poivre
- Calories = Moyen
Preparación
- Precalentar el horno a 180°C (th,6). Enjuagar los calabacines y cortarlos a lo largo en rodajas. Colóquelos en una bandeja de horno antiadherente, salpimiéntelos, rocíelos con aceite y hornéelos durante 15 minutos. Cortar la mozzarella en dados.
- Aumentar la temperatura del horno a 200°C (th,6/7). Engrasar una fuente de horno y alternar capas de rodajas de calabacín y salsa de tomate, espolvoreando un poco de mozzarella entre cada capa.
- Salpimentar, terminar con la mozzarella, espolvorear con pan rallado y hornear de 15 a 20 minutos, hasta que la parte superior esté bien gratinada. Espolvorear con albahaca y servir.